Siguiendo la línea de estos últimos días continuaré hablando de la predicción, la cual es, a fin de cuentas, el fundamento de toda opinión que se precie de ser considerada como científica.
Voy hablar rápido del tema, pues a buen entendedor pocas palabras bastan.
Navegando por internet me he tropezado con el blog "Animal irracional", escrito por Gullivert y el cual se ha dedicado a hablar de ciertos temas que a mí, personalmente, me apasionan; entre los cuales cabe destacar la predicción.
Como sabrán quienes hayan leído mi 'Maldición de la filosofía' (al menos quienes hayan leído los últimos retoques que hice en la metafísica), las ciencias mecánicas y racionales afirman que la naturaleza se puede describir mediante dos tipos de comportamientos o éticas: el proceso reversible y el proceso irreversible.
Todas las leyes universales de las ciencias se formulan suponiendo que sólo existen procesos reversibles, puesto que éstos describen procesos que interaccionan con un entorno que resulta estar absolutamente controlado. Los procesos reversibles describen ciclos o regularidades y por tanto, son absolutamente determinados y racionales. Sin embargo, reconocen que los procesos reversibles reflejan, sólo, casos ideales. En realidad, confiesan los mecánicos, en la naturaleza nunca encontramos procesos reversibles, sino que todos ellos son irreversibles.
Los procesos irreversibles son procesos que lidian con entornos que están fuera de nuestro control y por tanto nos saben indeterminados. En este caso, pues, tenemos que estudiar un proceso que nos es indeterminado o caótico ¡Pero que sea caótico no indica que sea irracional! Todo proceso irreversible es, simplemente, un proceso determinado que ha sufrido una determinada variación en su entorno, pero que desconocemos.
Tenemos, pues, que para predecir es necesario controlar los entornos de los sistemas que queramos estudiar. La más mínima variación del entorno nos hecha por los suelos nuestra capacidad adivinatoria; y en vez de apreciar ciclos y regularidades apreciamso caos e incertidumbre.
Sin embargo, nuestra capacidad para controlar los entornos y determinarlos resulta ser sumamente limitada, por se dice que en última instancia los procesos reversibles son casos ideales. En realidad siempre hacemos frente a sistemas pseudo-reversibles.
Sin embargo, existen otros tipos de sistemas en la naturaleza: los sistemas recurrentes. Estos no expresan procesos y por tanto, no son ni determinados ni racionales. Son sistemas aislados o prácticamente aislados, y su comportamiento resulta ser absolutamente irracional.
Sin embargo a lo largo del siglo XX los sistemas recurrentes no han sido estudiados. Bueno, quizás ahí tenemos, nosotros, un campo nuevo para adentrarnos y descubrir nuevas realidades.
Voy hablar rápido del tema, pues a buen entendedor pocas palabras bastan.
Navegando por internet me he tropezado con el blog "Animal irracional", escrito por Gullivert y el cual se ha dedicado a hablar de ciertos temas que a mí, personalmente, me apasionan; entre los cuales cabe destacar la predicción.
Como sabrán quienes hayan leído mi 'Maldición de la filosofía' (al menos quienes hayan leído los últimos retoques que hice en la metafísica), las ciencias mecánicas y racionales afirman que la naturaleza se puede describir mediante dos tipos de comportamientos o éticas: el proceso reversible y el proceso irreversible.
Todas las leyes universales de las ciencias se formulan suponiendo que sólo existen procesos reversibles, puesto que éstos describen procesos que interaccionan con un entorno que resulta estar absolutamente controlado. Los procesos reversibles describen ciclos o regularidades y por tanto, son absolutamente determinados y racionales. Sin embargo, reconocen que los procesos reversibles reflejan, sólo, casos ideales. En realidad, confiesan los mecánicos, en la naturaleza nunca encontramos procesos reversibles, sino que todos ellos son irreversibles.
Los procesos irreversibles son procesos que lidian con entornos que están fuera de nuestro control y por tanto nos saben indeterminados. En este caso, pues, tenemos que estudiar un proceso que nos es indeterminado o caótico ¡Pero que sea caótico no indica que sea irracional! Todo proceso irreversible es, simplemente, un proceso determinado que ha sufrido una determinada variación en su entorno, pero que desconocemos.
Tenemos, pues, que para predecir es necesario controlar los entornos de los sistemas que queramos estudiar. La más mínima variación del entorno nos hecha por los suelos nuestra capacidad adivinatoria; y en vez de apreciar ciclos y regularidades apreciamso caos e incertidumbre.
Sin embargo, nuestra capacidad para controlar los entornos y determinarlos resulta ser sumamente limitada, por se dice que en última instancia los procesos reversibles son casos ideales. En realidad siempre hacemos frente a sistemas pseudo-reversibles.
Sin embargo, existen otros tipos de sistemas en la naturaleza: los sistemas recurrentes. Estos no expresan procesos y por tanto, no son ni determinados ni racionales. Son sistemas aislados o prácticamente aislados, y su comportamiento resulta ser absolutamente irracional.
Sin embargo a lo largo del siglo XX los sistemas recurrentes no han sido estudiados. Bueno, quizás ahí tenemos, nosotros, un campo nuevo para adentrarnos y descubrir nuevas realidades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario