viernes, 20 de marzo de 2009

Caprichosa violencia

Estaba leyendo el otro día un texto de Foucault llamado "Derecho de muerte y poder sobre la vida", en donde se comenta el tránsito entre las formas de gobierno antiguas con las modernas.

Entre otras cosas ese texto me hizo pensar en algo que advertí a partir de Locke: las teorías políticas modernas, de las cuales surge la democracia actual, no niegan la violencia, la muerte y la destrucción (los mecanismos de sustracción), sino la violencia sinsentido.


Lo que se va imponiendo con la edad moderna, no es la paz a toda costa y el respeto incondicional y mútuo, sino la convicción de que todo ejercicio de violencia debe estar justificado y razonado ¡La violencia debe ser civilizada! Resulta inadmisible para todos los teóricos políticos de los últimos siglos que la violencia y el poder se ejerzan de forma arbitraria, irracional, sin sentido, 'desmesurada'... ¡Por puro capricho del poder! Contra la caprichosa violencia, tant típica de las épocas antiguas, se ponen los ejemplos de Nerón o Calígula -Eso es lo que hay que evitar; y todo cuanto se parezca- Se exige con instransigencia durante la edad moderna.


Así tenemos, por ejemplo, que cuando EE.UU quiere hacer una guerra, siente la necesidad de justificar y razonar el porqué hace la guerra ¡Apela a una causa justa! Semejante ética y actitud demuestra muchas cosas, por ejemplo: que la razón para nada es independiente ni neutra, sino más bien un instrumento de nuestros intereses, nuestras excitaciones y pasiones ¡La razón intenta justificar motivos!


Otro ejemplo actual viene a ser la carga que la policia catalana h ejecutado esta semana, en Barcelona, sobre ciertos estudiantes y periodistas (hubo 80 y pico heridos). Lo que se cuestiona el "público" catalán no es la violencia misma, sino si esa violencia ejercida por los antidisturbios fue 'desmesurada' o no, es decir, si estaba justificada por cuanto sucedia en la manifestación -¿Tenía sentido actuar como actuó la policia?- Se preguntan muchos.


Dejando de lado semejantes disquisiciones públicas y mediáticas, lo que a mí me preocupa e interesa es la necesidad moderna de tener que racionalizar, justificar y civilizar permanentemente la violencia. Creo que ello es digno de atención y estudio, y quizás, también, debate.


En base a esta cuestión, surge un tema que me ha traido no pocos mal entendidos; a saber: acerca de las opiniones imperantes sobre el nazismo y sus campos de exterminio. Resulta, que gran parte de las opiniones que abordan este complejo y delicado tema se fundamentan precisamente en el punto expuesto: no se entiende toda esa violencia, esa muerte, ese abuso y esa destrucción -¿Por qué razón sucedió eso?- Se han preguntado muchos, especialmente los más afectados.

Ciertamente se ve lo sucedido en Alemania como una locura colectiva, y no se "entiende" como esa locura pudo materializarse. No en vano, son muchos -especialmente los judíos- quienes han intentado estudiar el nazismo y el holocausto con el fin de 'comprender' qué sucedió ... y porqué sucedió. Aunque también han ido más allá: han buscado culpables y han juzgado todo eso como el "mal" mismo ¡Han buscado una venganza moral! Hecho, éste, que da mucho para reflexionar y, tambien, desconfiar.

En fin, la gente civilizada -el público- no acepta que se ejerza la violencia de forma caprichosa y arbitraria ¡Hay que justificarse! Aunque, a decir verdad, con justificarse no basta: hay que convencer a los demás... Al más puro estilo de Unamuno. Sin embargo, la violencia siempre está por encima de la razón, al ser condición sine qua non de la vida. Pero el público lo ignora y cree que vivir es, de una forma u otra, algo razonable, mientras la historia, la biología y la evolución niegan tan ilusa creencia moderna ¿O no?

Sobre estos temas aún está todo por escribir. A excepción de unos pensadores, lo que se ha dicho hasta la fecha al respecto da para reir.












2 comentarios:

Gabriel Otero dijo...

RDC:

La estupidez humana no tiene limites, en la historia reciente se ejemplifica con la invasión a Irak: nunca entendí porque España se sumó a semejante atrocidad, el argumento como tú sabes fue que tenían armas de destrucción masiva, el trasfondo era el petróleo. Estados Unidos va en declive en su poderío tecnológico y militar, ahora resurge China.
La violencia nunca debe tener justificación, en Alemania puede nacer otro Fuhrer por la misma idiosincrasia teutona.
Saludos
GO

José Luis Ferreira dijo...

Hombre, como la violencia siempre existirá, mejor si tiene justificación y nos ponemos de acuerdo (y nos limitamos) en cuál es ésta. La defensa propia (individual o de una sociedad) y la ayuda al indefenso (en la sociedad propia o en otra) pueden ser justificadas.

Para evitar las arbitrariedades de invadir a un hijo de puta sí y a otro no, porque es el nuestro, y hacerlo sin el acuerdo internacional sería partidario de hacer un ránking de los gobiernos más odiosos del planeta e ir cada año por el que esté más alto en la lista (seguramente no invadiendo a lo loco).