San Agustín proclamó "No salgas afuera, vuélvete a ti mismo; la verdad habita en el hombre interior" Toda la edad medieval se lanzó con fervor a por esta salvaje postura ascética de reclusión, aislamiento y penitencia corporal ¡Ahí veía su salvación personal! Durante siglos el europeo fue adiestrado tenazmente al recogimiento y la interiorización ¡Se metió a la bestia humana en una jaula!
¿Qué provocó eso? Se dice que lo que se prohibe excita ¿Y no fue así para el cristiano de Europa? Ese tenaz ascetismo y reclusión interior lo convirtió, para sorpresa de todos, en la bestia más salvaje y extraviada... La bestia con mayores ansias de expansión y experimentación. Nadie en la historia de la humanidad había sentido semejante anhelo desbocado, frenético y aciago por conquistar el 'mundo exterior' a costa de lo que fuera.
El hombre occidental perdió el miedo y el respeto a la naturaleza, empezando a cometer hybris... A vivir y disfrutar de la hybris; tan temida y respetada para las civilizaciones antiguas.
El hombre cristiano, después de siglos de aventura espiritual buscando la verdad en su "interior" exclamó -En mi interior sólo hay engaño: un conflicto de volubles sensaciones e ideas puras, pero vacías-. Y ante semejante decepción espiritual pensó -La verdad está ahí fuera-. Y fue entonces cuando se puso a contemplar las estrellas buscando ahí la verdad al cuestionarse si él era, o no, el centro de la Existencia.
Le debemos al cristianismo y a su milenaria disciplina ascética de flajelación contra todo lo corporal y externo, esas feroces ansias de exploración y conquista que han caracterizado al hombre occidental de los últimos siglos.
La ciencia moderna no apareció porqué sí.
¿Qué provocó eso? Se dice que lo que se prohibe excita ¿Y no fue así para el cristiano de Europa? Ese tenaz ascetismo y reclusión interior lo convirtió, para sorpresa de todos, en la bestia más salvaje y extraviada... La bestia con mayores ansias de expansión y experimentación. Nadie en la historia de la humanidad había sentido semejante anhelo desbocado, frenético y aciago por conquistar el 'mundo exterior' a costa de lo que fuera.
El hombre occidental perdió el miedo y el respeto a la naturaleza, empezando a cometer hybris... A vivir y disfrutar de la hybris; tan temida y respetada para las civilizaciones antiguas.
El hombre cristiano, después de siglos de aventura espiritual buscando la verdad en su "interior" exclamó -En mi interior sólo hay engaño: un conflicto de volubles sensaciones e ideas puras, pero vacías-. Y ante semejante decepción espiritual pensó -La verdad está ahí fuera-. Y fue entonces cuando se puso a contemplar las estrellas buscando ahí la verdad al cuestionarse si él era, o no, el centro de la Existencia.
Le debemos al cristianismo y a su milenaria disciplina ascética de flajelación contra todo lo corporal y externo, esas feroces ansias de exploración y conquista que han caracterizado al hombre occidental de los últimos siglos.
La ciencia moderna no apareció porqué sí.
4 comentarios:
PD/ San agustín se engañó: la verdad no está dentro de nosotros. Pero, ¿significa por ello que está fuera de nosotros?
Quizás también quienes buscan la verdad ahí fuera lleguen a frustrase algún día ¿Qué sucederá entonces?
La teoria és suggerent i a priori plausible, però si comences a repasar, les guerres tribals dels negres, l'Islam, etc. veus que caldria matisar molt. L'Església predicava això, però no serà que eren pocs els que podien seguir-ho? No crec que els ascetes dels monestirs -els que més ho seguien- fossin salvatges expansionistes.
És cert, voler trobar la veritat amb un microscopi o telescopi frustrarà. Per tant doncs, com aquell grec del candil: anar buscant per on hom pugui.
Ah, que et milloris -baixa al canto?-, en quin equip jugues? I merci;)
Hola Criteri.
És cert que s'ha de matisar i posar alguns text que 'demostrin' la tesis; perque és simplement una tesis i una idea.
Si t'interessa la idea crec que hauries de buscar-ho en el que comenten al respecte els nous psicólegs moderns: Descartes, Lock, Kant, el sidealistes alemnays i fins i tot Heidegger.
Per exemple: Descartes és precisament qui diu: dins de nosaltres només hi han sensacions mesclades i confoses i idees pures, però vuides. A partir d'aquí proposa l'existència delmón extern i geométric, de la naturalesa com a font de la veritat. En aquest sentit, descartes comenta que disciplinant de certa forma les nostres volubles sensacions i idees serem capaços de descobrir com és realment el món extern.
O mirem kant, per exemple, quan divideix el món fenomènic de la cosa en sí: el primer és produit pel nostre 'jo interior' i el darrer resta fora de nosaltres. Bé, doncs, el món fenomènic es una aparença i l'autèntica realitat está fora de nosaltres, per tant, ens és incognoscible... però la podem pensar. D'aquí que Kant plantegi la filosofía transcendental com la ciència superior que estudia com han de ser les coses en sí.
O heiddeger qui ja reconeix que el nostre interior está obert al món.
En definitiva, tota l'evolució psicológica moderna és aquest intent de trencament amb el món interior intentant buscar, a fora, la veritat.
En fi, no sé si m'he explicat prou bé, però la cosa, em sembla, aniria per aquí. Ens veiem
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